Puedes colocar las etiquetas de nombres para niños en cualquier superficie o material lisos, como plástico, metal, silicona o papel. Así que pégalas en bolígrafos, lápices, estuches, calculadoras, libros, botellas, fiambreras... ¡y un largo etcétera de cosas! Antes de ponerlas, no te olvides de comprobar que la superficie no contenga polvo, suciedad ni otros elementos.

Como las etiquetas infantiles para nombres no están hechas para adherirse directamente en tejido, disponemos de sellos textiles con los que estampar su nombre en la ropa que lleven a la escuela.

Además de las etiquetas para calzado, que miden 30 x 30 mm y tienen forma de arco, contamos con etiquetas infantiles personalizadas en 4 tamaños diferentes.

Nuestras minietiquetas (30 x 10 mm) tienen espacio para el nombre o las iniciales y quedan muy bien en bolígrafos y lápices. Las etiquetas infantiles pequeñas (48 x 9 mm) tienen un tamaño parecido, pero más espacio para el primer apellido o el aula. Las etiquetas infantiles medianas (48 x 20 mm) son ideales para libros y botellas, mientras que las más grandes (en círculo, de 40 x 40 mm, o en cuadrado, de 48 x 48 mm) tienen espacio de sobra para el nombre y los apellidos u otros datos que quieras añadir, como alergias o un número de teléfono.

Si pides minietiquetas infantiles personalizadas, te recomendamos que escribas el nombre o el primer apellido, o el nombre y las iniciales de los apellidos, por ejemplo, «Juan Ruiz» o «Juan R. M.», porque el espacio es limitado. En las etiquetas infantiles para nombres pequeñas y medianas caben el nombre y los apellidos completos. En las más grandes, caben otros datos, como el nombre de la escuela o el aula, o un número de teléfono si quieres indicarlo.

Sí, son resistentes al agua y las puedes meter en el lavavajillas. Si lavas a mano los recipientes donde estén pegadas, evita utilizar estropajos que rasquen o metálicos y cepillos, ya que se puede dañar el adhesivo. En cambio, usa un paño suave o una esponja para que sigan pegadas a la superficie lo máximo posible.

Cuando indicamos que las etiquetas no contienen PVC, nos referimos a que están fabricadas sin cloruro de polivinilo. El cloruro de polivinilo, o en su sigla, PVC, es un tipo de plástico que puede ser nocivo para los niños y el medio ambiente. Al optar por productos sin PVC, reducirás tu exposición y la de tu hijo a sustancias químicas tóxicas, como los ftalatos o el cloruro de vinilo entre otras.